Los datos y la información son la nueva moneda en un mundo digital y deben protegerse con el máximo cuidado. A continuación encontrarás cuatro reglas de seguridad que pueden ayudarte a mantener a salvo tu información personal.
- Protege tus contraseñas
Considera tus contraseñas como la primera línea de defensa contra el acceso no autorizado a tu información privada.
- Nunca reutilices contraseñas para varias cuentas
- Utiliza solo contraseñas seguras
- Mantén tus contraseñas en privado
- Considera el uso de gestores de contraseñas, por ejemplo Google Password Manager
- Activa la autenticación multifactor
- Verifica siempre la identidad
No todo el mundo es quien dice ser. Verifica siempre la identidad de la persona que te pide datos confidenciales o te convence para realizar una transacción sospechosa. Booksy nunca te pedirá que realices ningún pago ad-hoc ni que envíes tu información privada, como contraseñas o datos de tarjetas. Si alguien te pide que lo hagas, o simplemente no estás seguro de si se ha puesto en contacto contigo un agente de Booksy, envíanos un correo electrónico a help.es@booksy.com.
- Cuidado con el phishing
El phishing es el método de ciberataque más común, en el que los hackers utilizan emails, mensajes de texto y llamadas telefónicas para intentar obtener información personal o empresarial. Suelen intentar hacerse pasar por bancos o servicios de mensajería utilizando patrones de mensajes especialmente preparados para que parezcan válidos. Verifica siempre el remitente y lee atentamente el mensaje. Si observas algo sospechoso, no hagas nunca clic en ningún hipervínculo ni abras ningún archivo adjunto.
Prueba a detectar el phishing con este cuestionario de Google.
- Protege tus dispositivos
Seguir todas las buenas prácticas de seguridad puede resultar ineficaz si no mantienes a salvo tus dispositivos. En primer lugar, no dejes nunca el ordenador ni los dispositivos móviles desatendidos. Recuerda cerrar la sesión cuando no estés utilizando tus dispositivos. Y por último, pero no por ello menos importante, asegúrate de que tus nuevos dispositivos ejecutan los últimos parches de seguridad que se proporcionan junto con las actualizaciones del sistema operativo y del software: ¡nunca te los saltes!